Los trenes circularán por la Variante del Pajares a velocidades de entre 50 y 275 kilómetros por hora

Las previsiones señalan que en cuanto entre en servicio la Variante Ferroviaria del Pajares (se espera que antes de que finalice el presente año) el viaje en tren entre Madrid y Oviedo se cubrirá en unas tres horas, lo que supone un ahorro de más de una hora y media sobre el tiempo que se precisa para completar el trayecto en la actualidad. Pero las diferencias de velocidad a las que las unidades circularán por los tramos que se suceden en el recorrido son significativas. Tanto como que en algunos puntos no podrán superar los 50 kilómetros a la hora y en otros se alcanzarán los 275 kilómetros.

Según los estudios técnicos, los mínimos registrarán en torno a la estación de La Pola para aquellos "Alvia" que no hagan parada en la capital lenense, mientras que los picos más altos se sitúan en el túnel que perfora la Cordillera Cantábrica, con una de sus bocas en Los Pontones (Teyeo).

En sentido hacia la Meseta la velocidad irá subiendo paulatinamente, para establecerse en torno a los 160 kilómetros en las inmediaciones de Campomanes, para dispararse a los 265 kilómetros en la entrada al gran túnel, en cuya parte final se producirá una desaceleración, para salir por La Robla a unos 160 kilómetros por hora.

En esta última semana completa de febrero se ha producido el traspaso de gestión de “Adif Alta Velocidad” a “Adif Circulación y Mantenimiento”. En la fotografía, un tren de mercancías con una de las nuevas locomotoras que circularán por la Variante circulando por el centenario tendido payariego.