¿Cómo repercutiría la supresión del peaje de la Autopista del Huerna en Lena?

La Dirección General de Mercado Interior, Industria, Emprendimiento y Pymes de la Comisión Europea (CE) ha iniciado un proceso sancionador a España por la ampliación de la concesión de la Autopista del Huerna (AP-66) a la compañía “Aucalsa” (filial de “Itínere”) hasta 2050 durante el mandato del popular José María Aznar, sin ofrecer la oportunidad de concurrir a otras firmas interesadas en su explotación, a través del correspondiente concurso público. El Gobierno de la nación tiene ahora un plazo de dos meses para exponer sus argumentos de defensa. De no ser así el procedimiento, que se inició por una denuncia del entonces diputado regional Daniel Ripa, de Podemos, pasaría directamente al Tribunal de Justicia de la UE, que tendría que dictar sentencia.

En el caso hipotético de que la gestión pasase a manos del Estado y se anulase el peaje (15 euros para los vehículos ligeros en la actualidad), ¿cómo repercutiría en Lena ese cambio? A priori se vislumbran efectos positivos para el Concejo, pero también negativos.

Entre los primeros, evidentemente un “acercamiento” entre Asturias y León, que permitiría viajar desde La Pola a la capital de la provincia vecina en unos 45 minutos (la distancia es de unos 84 kilómetros), respetando los límites máximos de velocidad, y por una vía en teoría más segura que la Nacional 630. Eso supondría un intercambio de movimientos entre ambos territorios, con la consiguiente repercusión turística. Pero a la vez también provocaría un acusado descenso de los tráficos por la carretera de Payares, que se sentiría en los pueblos de la ladera y en especial en el comercio y, sobre todo, en la hostelería de Campomanes.

Por su parte, el Ayuntamiento demanda un cobro anual por el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a la AP-66, bajo la justificación de que se trata de suelo público del que se aprovecha una empresa privada, con fines lucrativos. En caso de pasar a ser del Estado lo más probable es que quedase exonerado de ese pago.

La Autopista del Huerna se abrió al tráfico en 1983 (la idea inicial era inaugurarla para el Mundial de Fútbol de 1982, pero no se llegó a tiempo) y la concesión, que expiraba el 17 de octubre de 2021, fue prorrogada otros 29 años, bajo la justificación de una rebaja en los precios de peaje. Sin embargo, sigue siendo la tercera más cara del país.