Los constructores no vislumbran un repunte en obra para vivienda en La Pola a corto plazo

De ser la industria más pujante del Municipio a borrarse por completo. A principios de siglo un informe de la “Sociedad Asturiana de Estudios Económicos e Industriales” (“SADEI”) situaba a la construcción como el sector con mayor fortaleza en Lena, aunque también es cierto que ya se atisbaban ciertas debilidades que advertían de que aquella hinchada burbuja inmobiliaria podría estallar en cualquier momento, como así sería. Lo que no se presagiaba era que la crisis iba a ser tan prolongada y que dos décadas después todavía se siga sin ver el final del túnel.

Constructores lenenses consultados por este periódico no observan indicios de que a corto plazo se vaya a revertir una situación que ha llevado a un parón total de obras para nueva vivienda en La Pola (en los pueblos sí se han edificado algunas, unifamiliares). Ni siquiera la entrada en funcionamiento de la Variante Ferroviaria del Pajares se vislumbra como motor capaz de reactivar el mercado, pues, como apuntan, “primero hay que darle salida al amplio stock de pisos que siguen sin vender”. Entre ellos, algunos incluso sin estrenar, como los de la última promoción que materializó la empresa local “Construcciones Espinedo”, en la calle Les Nozales. Muy diferente al panorama que se vivió en años como 2005, en el que se expidieron 21 licencias, o en 2006, con veinticinco.

En la actualidad sí existe una alta demanda de alquiler, con precios por los arrendamientos que oscilan entre los 250 y los 500 euros mensuales, en función de las características del piso y de su ubicación.

Como bolsas de suelo de mayor superficie, las situadas en las inmediaciones del Polideportivo “Jesús Suárez Valgrande”, en El Masgaín (en la fotografía), y por la cabecera norte, el área de La Llera, en teoría llamadas a poner marco a una futura expansión de la localidad.