¿“Cascayu” o circuito de chapas?; el sarcasmo popular se ceba con el diseño de un área pública en La Pola

La adecuación del solar que se abre entre La Fuentina y la Iglesia Parroquial de San Martín el Real, en el centro de La Pola, ya tiene el dudoso honor de capitanear el listado de obras a las que más comentarios sarcásticos se han propinado en Lena. Desde que en las redes sociales apareciesen unas fotografías de diferentes perspectivas de un espacio que inicialmente se concibió como aparcamiento público de vehículos (con una supuesta capacidad para 70 coches, según se anunció entonces desde instancias municipales) han llovido las burlas sobre unas líneas sobre el asfalto que no se sabe cuál es realmente su funcionalidad.

Un “cascayu”, un circuito para jugar a los clásicos “chaplillos”, una pista para ovnis o para prácticas para el carnet de moto, un punto para que la Guardia Civil pueda realizar pruebas de alcoholemia, un circuito de karts o un trazado para comprobar si la bebida ha hecho efecto son algunos de los muchos chascarrillos que circulan tanto por Internet como a pie de calle, donde el singular diseño se ha convertido en centro de conversación de muchas tertulias.

Como se publicó en este periódico, el solar que ocupó el desaparecido “Garaje Caspi” estaba sin uso alguno tres años después de que fuese adquirido por el Ayuntamiento, en una operación por la que pagó 178.384 euros a sus anteriores propietarios, en un principio con el propósito de paliar las carencias de aparcamiento en el centro urbano. En una de sus partes se han habilitado una decena de estacionamientos.

En la imagen, dos fotografías con diferentes perspectivas del área acondicionada.