A la Variante ya no le hacen falta más pruebas

Ahora sí parece que se ha entrado en la cuenta atrás definitiva, tras casi 20 años desde que un frío 11 de febrero de 2004 se colocase en Los Pontones (Teyeo) una primera dovela que simbolizaba el inicio de unas obras que han dejado un irreparable reguero de daños en Lena y después de una docena de anuncios de plazos incumplidos para su inauguración. Si no surge un enésimo contratiempo de última hora, la Variante del Pajares entrará en servicio el próximo noviembre. Más en concreto, a finales de ese mes, según las previsiones.

Lo hará tras haber superado con éxito unos test de fiabilidad que concluían con resultados satisfactorios una vez que unidades de viajeros y de mercancías han cubierto más de 3.000 kilómetros de circulación por las vías, entre La Robla (León) y Ujo. En algunos tramos los trenes llegaron a superar los 200 kilómetros a la hora.

Para los días 26 y 27 de septiembre están programados unos simulacros de evacuación en los que intervendrán equipos de emergencias de las dos provincias y a partir de ahí tan sólo restará la autorización de la “Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria” (“AESF”) para la puesta en marcha del tráfico diario.

Los recorridos de pruebas se han realizado en horario de madrugada, de doce de la noche en adelante, con cuatro por cada jornada, verificando todo lo necesario para evitar cualquier incidencia.

En la fotografía, uno de los “trenes laboratorio” que el “Administrador de Infraestructuras Ferroviarias” (“ADIF”) usó en un principio para realizar pruebas en la Variante.